muerda mi lengua
y apague mis ojos
o cuando me sacrifiquen las nutrias junto al río
recuperen mi cuerpo
y dejen que arda,
una vez hecho polvo de maíz
dejen volar una parte de mis cenizas por Paquix
y la otra mitad que caiga al río ó al mar
así será más fácil para vos
encontrarme en tus cordilleras
y/o buscarme en mis ríos.
así volveré al viento
que me trajo
y al agua donde
me gestaron,
porque la existencia
siempre ha de fluir.