martes, 14 de febrero de 2012

Memoria Viva




El sol poniente,
Obstruida por nubes negras,
Surcos de recia lluvia,
Se filtra entre los poros de los viajantes,
Se desliza en los labios de los descubiertos,

El ocaso del 12 de febrero,
el golfete bebió de tu sangre,
Sangre joven,
Sangre valiente,
Se mezcló entre olas y lluvia,
Y desde aquel día no ha cesado de llover.

De modo que cada mañana,
una neblina silenciosa eleva tu espíritu
y las guarda en la boca de los siguanes.

… Las plantas amanecen calladas, caídas, estropeados de ausencia.

Aq’ab’al, no para de llover,
nos llueve por dentro,
por tan cínica e imperante impunidad,
la única actitud ética es no olvidar el hecho irracional.

Tú Aq’ab’al,
irrigaste los retoños de reivindicación
en cada porción de cerebro joven fértil,
por tanto en nuestras memorias impregnas
y retoñas cada vez que tu ausencia se hace larga y lejana.

Que tomen vuelo estas palabras,
que viajen por xib’alb’a
que filtre por la raíz mas profundo del gran árbol,
y toque corazones sensibles e insensibles  a la “justicia”!



4 Q'anil
13.02.12

Ajch'ok

  Atz’um   okox   nik’te’ ha‘   moqre chiru laa b’aqel              chi ruuch aawe              chi ru’j laawismal     k’iru c...